Ana Carvajal
2017 - 2018
Angie Vergara
2015 - 2016
Dios me dio la maravillosa oportunidad de ser electa Reina de Quito, una gran bendición y un gran compromiso de trabajar en la búsqueda de cambios en la sociedad.
Cristina Elizalde
2013 - 2014
Después de todas estas experiencias maravillosas puedo decir con seguridad que la Fundación Reina de Quito se convirtió en mi segundo hogar y las ex-reinas en una familia.
Silvana Di Mella
2012 - 2013
Me di cuenta que cuando las cosas se hacen con pasión, cuando la causa es justa y genuina, un país entero se moviliza.
Ana Carolina Vela
2010 - 2011
El apoyo de los quiteños, ese amor tan cálido y sincero que le brindan a la Reina es un empujón para seguir trabajando y realizando hermosas obras.
Caridad Del Castillo
2009 - 2010
La mejor experiencia de mi vida, fue el regalo más hermoso que me dio la corona de Reina de Quito, envuelto con mucho cariño, para que yo lo aprecie y lo devuelva con todo mi amor.
Cristina de la Paz
2007 - 2008
Ser Reina de Quito para mí fue una experiencia maravillosa, marcó mi vida porque fue un año lleno de experiencias nuevas.
Karla Torres
2004 - 2005
¡Un año de aprendizaje, de forjamiento personal y espiritual y una vida de agradecimiento por todo lo que fue!
Valentina Mera
2006 - 2007
Esta experiencia maravillosa de servicio a la ciudad, tuvo y tiene muchísima influencia en mi vivir. La Fundación es un espacio por medio del cual se canalizan grandes ideas.
María Gabriela Galárraga
2005 - 2006
Reinar es enamorarse de Quito y convertirse en un actor comprometido por el cambio y las mejoras de esta bella ciudad”.
Maria Lorena Maldonado
2003 - 2004
Mi vida tiene ciertos ejes motores, motivaciones que me inspiran a mirar más allá, a creer que el mundo sí puede ser un lugar mejor y yo soy parte de ese mundo.
Ana Carolina Hidalgo
2002 - 2003
Me comprometió a continuar el trabajo iniciado por mis antecesoras, así como impulsar la campaña Sesenta y Piquito.
Ana Lizette Avilés
2001 - 2002
La banda y la corona las guardo con orgullo, es solo un recordatorio de lo privilegiada que fui por tener ese año de gratas e inmemorables experiencias,
Paulina Espinosa
2000 - 2001
Si no vivimos para servir, no servimos para vivir”.
Natalia Torres
1999 - 2000
Sigo vinculada a la Fundación porque me enorgullece pertenecer a una institución en la cual sus miembros trabajan desinteresadamente para aportar con los más necesitados.
Daniela del Castillo
1995 - 1996
El Reinado fue lamejor universidad de mi vida, le doy gracias a Dios, y a todas las personas que me apoyaron., y mis hijos al saber que su madre y abuela fueron Reinas de Quito.
Paulina Mesec
1998 - 1999
“Con entrega y amor se consiguen grandes metas”.
Ana María Serrano
1997 - 1998
La Fundación es un lugar mágico donde las cosas pasan, los sueños se cumplen, los imposibles no existen, las amigas son para siempre, y la ayuda desinteresada es REAL.
María Lorena Vela
1993 - 1994
Quiero agradecer a todas las personas que de una u otra manera colaboraron durante mi año de servicio, a todas las ex Reinas y a todos miembros de la Fundación Reina de Quito.
Cristina Arellano
1994 - 1995
Dios me dio la maravillosa oportunidad de ser electa Reina de Quito, una gran bendición y un gran compromiso de trabajar en la búsqueda de cambios en la sociedad
Macarena Valarezo
1992 - 1993
El reinado de Quito marcó mi vida! Fue el año más hermoso y con los mejores recuerdos que he tenido hasta hoy… ¡aprendí tanto!
María Mercedes Lasso
1989 - 1990
“Un día soñé que la vida era alegría. Desperté y me di cuenta que la vida era servicio. Serví y descubrí que el servicio es alegría”.siempre!
María Fernanda Salvador
1990 - 1991
Definí mi año de reinado con las palabras del Premio Nobel de Literatura R. Tagore: “Yo soñaba que la vida era alegría, y vi que la vida era servicio; serví y vi que el servicio era alegría”.
Margarita Bertero
1988 - 1989
Sin duda todas las interrogantes que había tenido en un inicio ya tenían respuesta. ¡Definitivamente este reinado había cambiado mi vida para siempre!
Cristina Saona
1987 - 1988
Me queda la grata sensación de la labor cumplida y la certeza de que como seres humanos somos responsables los unos de los otros.
Cármen Vásconez
1980 - 1981
Ser Reina me enseñó a conocer la realidad de esta bella ciudad, y la oportunidad de trabajar por varios sectores que requerían ayuda muchas veces emergente.
Alexandra Vásconez
1981 - 1982
Permanezco en contacto con la Fundación Reina de Quito y con la labor que desarrollan tanto la Reina del momento así como las queridas ex reinas.
Maritza Granja
1983 - 1984
Perdurará en mi corazón gratitud hacia las manos generosas que me apoyaron, porque gracias a ellas recibí sonrisas de los niños, bendiciones de los viejitos… ¡Gracias, Quito!
Nathalie Proaño
1982 - 1983
Mientras fui Reina de Quito aprendí a querer a mi ciudad donde decidí echar raíces, formar mi familia y contribuir en su desarrollo a través de mi profesión y de mi hogar.
Consuelo Albornoz
1976 - 1977
Fue un orgullo, definitivamente, ya que una quiere mucho a su ciudad y servirle como Reina fue lo mejor. Durante mi reinado hice mucha ayuda social en forma individual.
Margarita Haensli
1977 - 1978
Mi incorporación a la Fundación Reina de Quito, fue un paliativo, una sensación angelical, y no dejo de agradecer por todo el aporte cálido y emocional que allí he encontrado
María Francisca Freile
1979 - 1980
Realmente un año es muy poco tiempo, felizmente hay una vida por delante y no faltan oportunidades para poder ayudar a quien lo necesita. ¡Lo importante es poder descubrirlas!
Lucía Burneo
1978 - 1979
Recuerdo cuando fui elegida por las reclusas del Centro de Rehabilitación Femenina, como “Reina de la Cárcel”, por el trabajo social realizado, con ellas..
Rocío Jarrín
1974 - 1975
Estoy segura de que haber sido Reina de Quito me hizo una mujer más humana, más sensible y con una enorme gratitud para quienes me permitieron vivir este reinado.
María Piedad Lalama
1973 - 1974
Desde el primer momento que recibí la corona, supe que tenía un gran reto y con mucha responsabilidad y alegría lo asumí; era un sueño de adolescente hecho realidad.
Carmen Pérez
1973 - 1974
Dios me dio la maravillosa oportunidad de ser electa Reina de Quito, una gran bendición y un gran compromiso de trabajar en la búsqueda de cambios en la sociedad.
Susana Castro
1970 - 1971
Veo con orgullo que esta iniciativa no solo persiste en sus objetivos, por los que fue creada, sino que se ha agrandado y ha sido imitada en otras ciudades del Ecuador.
Tatiana Calderón
1971 - 1972
Quito es símbolo de la unidad y solidaridad, donde cada día, con ilusión y esmero, se lucha por apoyar a la Reina en su labor social y en sacar adelante los programas de la Fundación
Ana Villaquirán
1968 - 1969
Soy la admiradora número uno del trabajo de la Fundación Reina de Quito en todo su camino recorrido y me siento orgullosa de pertenecer a la misma.
Elena Cárdenas
1966 - 1967
Sin embargo, no dejo de admirar la labor profesional y de entrega de la Fundación Reina de Quito, que la respeto y la tengo en la mira de mis sueños,
Cecilia Pérez
1963 - 1964
Actualmente no tengo relación con la Fundación, pero siempre estoy pendiente de todo lo que hacen, y felicito con todo mi corazón, porque considero que realmente es una obra maravillosa.
Pepita Sánchez
1959 - 1960
Retome la ruta del trabajo social con otras ex reinas que ponen el mismo empeño en las tareas que toman a su cargo, por pequeñas que puedan parecer.
Helena Serrano
1962 - 1963
Soy la admiradora número uno del trabajo de la Fundación Reina de Quito en todo su camino recorrido y me siento orgullosa de pertenecer a la misma.